Como se trata de una máscara a medida, trabajaremos en grupos de 2 o más personas, ya que una de ellas será el modelo que presta su rostro para que demos forma al antifaz. En este caso seremos 2, y la modelo es Paula.
Elementos que necesitarás:
- Un paquete de vendas de yeso (puedes encontrarlas en la farmacia)
- Film transparente
- Tijeras
- Un bol grande con agua tibia
Consejos:
- Debemos elegir una habitación de la casa como la cocina para ponernos manos a la obra, ya que solemos contar con una mesa grande, tenemos el grifo y el suelo no es difícil de limpiar si se mancha.
- La persona que va a servir de modelo deberá llevar ropa vieja por si le cae algo de yeso y recogerse el pelo con una cinta o diadema sobre la frente.
- Hay que pensar bien el personaje o motivo con el que vamos a decorar: podemos hacer un antifaz hasta la altura de la nariz o una máscara que cubra todo el resto, y podemos ponerle cuernos, orejas y otros elementos con las vendas de yeso, para darle personalidad.
Pasos a seguir:
- Recortamos rectángulos y tiras alargadas de venda, unos más pequeños y otros tan largos con el ancho de la cara
- El modelo debe estar recostado sobre una almohada, o tumbado sobre una esterilla, e intentar gesticular lo menos posible. Le cubrimos la cara con film transparente, dejando libres en todo momento las fosas nasales para que pueda respirar bien.
- Tomamos de una en una las vendas y las vamos sumergiendo en el bol de agua tibia, y las vamos poniendo sobre el rostro. Poco a poco vamos cubriendo la zona que queremos que forme el antifaz, dejando ojos y nariz destapados y asegurándonos de dar la forma del rostro. Así hasta tener la primera capa.
- Después colocamos vendas más largas que crucen el puente de la nariz en forma de cruz, y otras en la frente y en los laterales.
- Antes de que se seque demasiado, podemos cortar las partes del vendaje que sobren, dando la forma deseada al antifaz.
- Reforzamos con más vendas los bordes de los ojos, ponemos una tira al borde del antifaz doblándola hacia dentro para que no queden esquinas afiladas; y por último rellenamos la parte interior.
- Alisamos con los dedos todo el antifaz.
- Después, hay que dejar la máscara sobre el rostro del modelo entre 15 y 25 minutos para que tome forma y se seque un poco
- A continuación, la retiramos y hacemos un agujero a medio camino entre el borde y el ojo, a un lado y al otro, con un punzón o un elemento afilado, y ponemos unos palillos redondos en los agujeros para que no se cierren.
- Dejamos secar toda la noche, en una zona seca.
- Al día siguiente hacemos girar los palillos con mucho cuidado, y los dejamos puestos.
- Ahora es el momento de decorar la máscara: se pueden poner adornos como plumas, encaje, abalorios, etc. Depende del aspecto que queramos que tenga. En nuestro caso, hemos elegido un personaje de dibujos animados independientes: Stimpy. Lo que hemos utilizado es tempera escolar, pinceles de varios grosores, agua y servilletas para limpiar los pinceles, y una paleta para mezclar colores.
- Teniendo el dibujo del personaje o motivo a plasmar, hacemos un boceto a lápiz sobre la máscara. A continuación, rellenamos de color las partes de tonos más claros, y después las de tonos más oscuros; y por último, dibujamos los bordes y los detalles que dan más personalidad a nuestro personaje.
Hay que dejar secar un par de horas, y ya sólo faltaría quitar los palillos y poner una goma o un lazo (nos podemos ayudar con una aguja, por ejemplo.
He aquí el resultado. ¡Esperamos que os salga bien!
No hay comentarios:
Publicar un comentario